Cómo calmar tu mente cuando la ansiedad te secuestra

Cuando la ansiedad se activa, todo parece acelerarse: los pensamientos, el cuerpo, las emociones.
De repente, una pequeña preocupación puede sentirse como una amenaza enorme.
Y aunque una parte de vos sabe que no es tan grave, otra parte no puede parar.

¿Qué pasa ahí?
Tu sistema nervioso entra en modo supervivencia. Y en ese estado, la mente empieza a distorsionar la realidad.

La buena noticia es que hay algo que podés hacer: cuestionar tus pensamientos con compasión, en vez de creer todo lo que te dicen.

Una herramienta práctica para regular tu ansiedad en el momento

Para ayudarte a hacerlo, creamos una plantilla práctica que podés usar cada vez que sientas que tu mente te está llevando por caminos de miedo, ansiedad o catastrofismo.

¿Qué vas a encontrar en esta herramienta?

Paso 1: Identificar el pensamiento ansioso

El primer paso para desactivar un pensamiento que te genera ansiedad es nombrarlo.
En la plantilla te guiamos para que lo escribas tal como viene a tu mente, sin juzgarte.
(Ejemplo: "Si no contesto ya, me van a dejar de querer.")

Paso 2: Cuestionarlo con preguntas concretas

Después, te proponemos una serie de preguntas terapéuticas que te ayudan a ver el pensamiento con más perspectiva:

• ¿Esto es un hecho o una interpretación?

• ¿Qué parte puedo comprobar y qué parte estoy suponiendo?

• ¿Estoy usando palabras extremas como "siempre", "nunca", "todo"?

• ¿Qué parte de mí se activó? ¿Qué necesita ahora?

• ¿Puedo recordarme que estoy a salvo ahora?

Estas preguntas están diseñadas para que puedas suavizar la intensidad emocional sin invalidar lo que sentís.

Paso 3: Regular tu cuerpo (opcional, pero muy recomendado)

Porque trabajar con la mente no siempre alcanza, también te sugerimos algunas acciones físicas simples que pueden ayudarte a volver al presente:

• Respirar profundo tres veces

• Mover el cuerpo (sacudir brazos, caminar)

• Tomar un vaso de agua

• Abrazarte o acariciar tu propio brazo con ternura

Pequeños gestos que le dicen a tu sistema nervioso: "Está bien, estás a salvo."

¿Para quién es esta plantilla?

• Para vos, si sentís que la ansiedad a veces te sobrepasa.

• Para vos, si querés empezar a tener más herramientas emocionales aunque todavía no estés en terapia.

• Para vos, si sabés que tu mente puede ser tu mejor aliada, pero todavía te cuesta confiar en ella.

Importante

Este recurso no reemplaza un proceso terapéutico profesional.
Es una herramienta para ayudarte a atravesar los momentos difíciles con más conciencia, y empezar a construir una relación más amable con tus pensamientos.

Si sentís que necesitás acompañamiento personalizado, en Harmony podemos ayudarte a encontrar un terapeuta que trabaje con vos en profundidad.

Descargá ahora tu plantilla "Cuestioná tu mente con compasión"

👉 Descargar plantilla

Regalate este espacio para pausar, observarte y acompañarte.
Tu mente puede ser un lugar más seguro. Solo hace falta empezar a construirlo.